LA infancia de Jesús
Jesús era un niño feliz e inocente. Era brillante en la sinagoga y tenía bastantes amigos. En la casa, ayudaba a María con los quehaceres domésticos, y a su padre adoptivo, José, con la carpintería.
José recibió la visita de un ángel, anunciándoles que, por la muerte de Herodes, podrían volver a Nazareth. Los tres partieron.
Era la fieta de pascua judía. Jesús tenía doce años y estaba con sus padres en Jerusalén. De repente, María mira a ambos lados: JEsús había desaparecido. Se lo notifica a José, quien lo busca desesperado.
- ¿Donde está nuestro hijo? ¿Lo han visto?- preguntaban. Nadie lo había visto. Pasaron tres días angustiados, y entraron al templo: ¡SORPESA! Jesús les estaba enseñando a los maestros de la ley.
- ¡Hijo mío!- grita María, - ¿No sabías lo preocupados que estabamos?
- Madre, comprende que debo pasar algún tiempo con mi padre.- Al principio no entendieron, no sabían que Jesús hablaba de Dios.